¿Qué es la Necrosis avascular de cadera?
La necrosis avascular de cadera (NAV) es una enfermedad donde la cabeza del fémur deja de recibir sangre, por lo que sufre lo equivalente a un infarto. Esto provoca que toda la zona de hueso cercana al cartílago articular y el propio cartílago puedan verse dañados, colapsando y perdiendo su forma redonda, lo que provoca en un primer momento dolor, dificultad para mover la cadera y cojera, y puede provocar a largo plazo artrosis de cadera.
¿Por qué se produce la necrosis avascular de cadera?
Aunque sabemos que la osteonecrosis de cadera es un infarto, en muchas ocasiones no sabemos la causa que lo provoca. Se han estudiado muchos factores que pueden provocar la necrosis, y en ocasiones los pacientes presentan varios de ellos. Las causas más habituales son sufrir una fractura o traumatismo en la cadera, el alcohol, algunos medicamentos como corticoides, antivíricos o tratamientos para el cáncer. También determinadas infecciones pueden provocar la necrosis. Como hemos dicho antes, en muchos casos es difícil determinar el origen y la causa concreta se desconoce.
¿Cómo sé si tengo necrosis avascular de cadera? Síntomas
Los síntomas más habituales de la necrosis son padecer dolor en la ingle, que aumenta o bien por la noche o bien cuando plantamos peso en la pierna afectada. Cuando la lesión evoluciona y sobre todo si la articulación se ocupa de líquido o sufre degeneración, el dolor puede incrementarse con cualquier movimiento e incluso la cadera perder movilidad. Ante la sospecha, se deben realizar tanto radiografías como una resonancia magnética de la cadera afectada.
La radiografía nos servirá para ver el estado general de la articulación, por si ya hubiera artrosis, lo que influye enormemente en el tratamiento como luego veremos. En la resonancia podremos ver el estado evolutivo de la lesión y la zona afectada.
Necrosis avascular de cadera. Tratamiento
El tratamiento dependerá de los síntomas y de la extensión de la lesión. En las lesiones muy pequeñas puede optarse por un tratamiento de reposo, evitar la carga sobre la pierna enferma y ejercicios de movilidad. Sin embargo, cuando la lesión es de un tamaño mediano o grande suele indicarse cirugía.
Cirugía de la necrosis de cadera
Existen varias técnicas quirúrgicas descritas para tratar esta enfermedad. Lo más habitual es que se empleen perforaciones óseas percutáneas con el objetivo de que la sangre vuelva a llegar al hueso y añadimos el aporte de células madre mesenquimales para que consigan regenerar la zona afectada.
Para asegurarnos un buen resultado con esta técnica, debemos asegurarnos que se mantiene la esfericidad de la cabeza femoral, lo que permitirá conservar la cadera a largo plazo sin necesidad de otras intervenciones.
En los casos que las lesiones lleven mucho tiempo de evolución y la cadera se encuentre tan degenerada que no podamos realizar el tratamiento anterior, se puede implantar una prótesis de cadera.
Recuperación tras la cirugía de necrosis avascular de cadera
La recuperación suele ser favorable. El dolor se suele controlar en los primeros 15 días- 1mes. Hay que dejar que pasen una 6-8 semanas para volver a comenzar a caminar con muletas para que el hueso tenga tiempo de comenzar a regenerarse. Cerca del tercer mes se abandonan las muletas y se puede ir aumentando progresivamente la vuelta a una vida normal.
Para saber más sobre la rehabilitación tras la cirugía de necrosis avascular pinche aquí.
Para saber más sobre la rehabilitación tras la prótesis de cadera pinche aquí.