¿Qué es el quiste de Baker?
El quiste de Baker, también conocido como quiste poplíteo, es una tumoración formada por el líquido sinovial de la rodilla. Este quiste se desarrolla cuando hay acumulación de este líquido en la parte posterior de la rodilla, entre los músculos semimembranoso y el gemelo interno. En ocasiones, cuando hay una lesión en la rodilla, la propia articulación reacciona generando más líquido que se puede acumular en la rodilla o formando este tipo de lesión.
Causas del Quiste de Baker
- Lesiones dentro de la rodilla: Las lesiones en la rodilla, como rotura de menisco o ligamentos, pueden causar inflamación y acumulación de líquido formándose el quiste poplíteo. Es común su aparición con la lesión del menisco interno.
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- Artrosis de rodilla: La inflamación en la articulación de la rodilla cuando padecemos artrosis o una inflamación generalizada de la rodilla (artritis) por ejemplo en enfermedades como sinovitis o artritis reumatoide, pueden provocar inflamación crónica en la rodilla, lo que puede conducir a la formación de un quiste de Baker.
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Síntomas del Quiste de Baker
Habitualmente el quiste comienza manifestándose como un bulto detrás de la rodilla. que puede ser doloroso al tacto. Además este bulto puede acompañarse de dolor o molestias en otras zonas de la rodilla. A veces también se nota rigidez o dificultad para flexionar o extender completamente la rodilla, esto puede suceder especialmente tras la rotura del quiste de Baker.
Diagnóstico del Quiste de Baker
Generalmente se realiza mediante un examen físico y pruebas de imagen. Durante el examen físico, el médico puede palpar la protuberancia detrás de la rodilla y verificar si hay dolor. Las pruebas de imagen, como la ecografía, la resonancia magnética (RM), pueden ayudar a confirmar el diagnóstico y evaluar la gravedad del quiste.
Tratamiento del Quiste de Baker
El tratamiento del quiste de Baker depende de la gravedad de los síntomas y la causa que lo provoque. Puede realizarse inicialmente la observación del quiste, sobre todo si el quiste de Baker es pequeño y no causa molestias significativas. También los medicamentos antiinflamatorios no esteroides (AINE), como el ibuprofeno o el naproxeno, pueden ayudar a aliviar el dolor y la inflamación asociados con el quiste de Baker.
Drenaje-Aspiración: En casos de quistes grandes y dolorosos, el traumatólogo puede optar por drenar el líquido acumulado en el quiste mediante una técnica llamada aspiración con aguja, aunque se puede reproducir hasta en el 50% de los casos. Ocasionalmente pueden realizarse infiltraciones para mejorar los síntomas.
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Tratamiento Quirúrgico del quiste de Baker
En casos en los que los tratamientos previos no sean resolutivos y el paciente siga con síntomas incapacitantes, puede realizarse la extirpación mediante cirugía. Una ventaja de intervenir esta patología es que se puede tratar la causa que provoca el quiste. Actualmente yo realizo esta técnica de mediante artroscopia, lo que permite una recuperación rápida y no requiere ingreso hospitalario dado que el paciente puede ir andando a las pocas horas de la cirugía.
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